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Conseguir un trabajo es una de las claves para que las personas con discapacidad sean realmente independientes y autónomas, y que pueden garantizar su plena inclusión y evitar la discriminación. Por eso, desde las Administraciones y empresas se aúnan esfuerzos para promover la creación de empleo destinado a las personas con discapacidad. Los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) son una prueba de ello: los contratos a personas con discapacidad se han incrementado en un 3,7% en este último año.
Sin embargo, actualmente conseguir un empleo es difícil para todo el mundo, y especialmente para alguien con discapacidad. Por eso, cada vez son más las personas que apuestan por constituirse como trabajadores autónomos y desarrollar sus propios proyectos empresariales. De hecho, existen ayudas de autoempleo para la discapacidad que ofrecen a estos emprendedores una alternativa para financiar sus negocios y establecerse en el mercado laboral.
Ayudas de autoempleo para la discapacidad: todo lo que debes saber
El objetivo de las ayudas de autoempleo para la discapacidad es que las personas con discapacidad en paro, sin ninguna ayuda económica o con dificultad de acceso a un trabajo puedan establecerse como autónomos y crear y gestionar sus propios negocios.
Actualmente, existen cuatro tipos de ayudas de autoempleo específicas para personas con discapacidad:
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Ayudas para crear un negocio
Este tipo de ayudas facilitan que una persona con discapacidad pueda establecerse como trabajador autónomo o por cuenta propia. La subvención puede ascender a 10.000 € (aunque depende de cada Comunidad Autónoma y de las condiciones del solicitante) que deberás destinar íntegramente al establecimiento de tu negocio (alquiler, permisos, compra de materiales y stock, etc.).
Para fijar la cuantía de la ayuda, los técnicos del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) tienen en cuenta criterios como tu grado de dificultad de inserción laboral o cuánto tiempo llevas en el paro.
Estas ayudas tienen como objetivo ayudarte a conseguir condiciones ventajosas a la hora de solicitar un préstamo o un crédito. Para obtener más información sobre estas ayudas te recomendamos que acudas a tu banco, independientemente de si es una entidad pública o privada.
Acorde con la legislación vigente, esta subvención corresponde con el dinero equivalente a la reducción de hasta 4 puntos del interés fijado para que se te conceda el préstamo. En el caso de los microcréditos para empresas (concedidos por organismos como Instituto de Crédito oficial - ICO), la subvención puede llegar a ser el coste total de los gastos financieros de la transacción. Tanto en préstamos como en microcréditos, la ayuda máxima es de 10.000 €.
Las ayudas de autoempleo para personas con discapacidad destinadas a formación tienen como objetivo cubrir, de forma total o parcial, cursos y seminarios relacionados, o bien con la gestión de empresas o bien con las nuevas tecnologías de la comunicación.
En ambos casos, se entiende que se trata de formación útil para la nueva etapa laboral que el trabajador autónomo emprende, y se destinarán a cubrir formación prestada por asociaciones de trabajadores autónomos con carácter intersectorial o por personas jurídicas o físicas especializadas que reúnan garantías de solvencia profesional. En este caso, puede cubrir hasta el 75% del gasto formativo, con un máximo de 9.000 €.
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Ayudas para la asistencia técnica
Estas ayudas tienen como objetivo financiar, de manera parcial, la contratación de los servicios externos necesarios para mejorar el desarrollo de una actividad empresarial, incluyendo estudios de viabilidad, desarollo de negocio, plan comercial, etc. La cuantía de esta subvención puede llegar a cubrir el 75% de los gastos de externalización hasta un máximo de 2.000 €.
¿Qué requisitos necesito para optar a una de estas ayudas?
Para optar a las ayudas para crear un negocio y a las ayudas de financiación debes cumplir los siguientes requisitos:
- Tener una discapacidad acreditada.
- Estar inscrito en el Servicio Público de Empleo como demandante de empleo.
- Haber comenzado a tramitar la actividad empresarial antes de solicitar la ayuda.
- Dar de alta tu actividad empresarial en la Seguridad Social y mantenerla, al menos, durante 3 años a partir de la solicitud de la ayuda.
- Cumplir con las obligaciones fiscales y requerimientos establecidos por tu Comunidad Autónoma y con aquellos requisitos fijados para la Recepción de Subvenciones públicas y disponibles en el artículo 14 de la Ley 38/2003 de 17 de noviembre sobre Subvenciones.
Para las ayudas de formación y las ayudas para la asistencia técnica te recomendamos que te informes en tu oficina del SEPE.
¿Existen otras ayudas para el autoempleo de personas con discapacidad?
Ademas de las anteriores, existen otras ayudas para el autoempleo de personas con discapacidad. La más importante es una bonificación en las cuotas a la Seguridad Social para autónomos, con una duración máxima de 5 años.
La reducción inicial es de tarifa plana durante los 12 primeros meses. Si cotizas por una base superior a la mínima, también optarás a un 80% de la reducción de la cuota. A partir de los 12 meses, puedes solicitar una reducción de la cuota de hasta el 50% (aquí tienes más información actualizada).
En ambos casos, deberás darte de alta en el RETA (Régimen Especial de la Seguridad Social de Trabajadores Autónomos) y acudir a una oficina de la Tesorería General de la Seguridad Social para tramitar tu bonifación.
Sabemos que establecerte por tu propia cuenta y emprender un negocio no siempre es sencillo. Conlleva mucho esfuerzo y tiempo, y a veces implica invertir otros recursos, entre ellos dinero. Aún así, no te desanimes: el autoempleo también tiene ventajas como la independencia, la creatividad o la posibilidad de desarrollar tus ideas, y es un reto que, a la larga, puede ser muy beneficioso.
Infórmante sobre estas ayudas al autoempleo para personas con discapacidad y pon en marcha tu negocio. Estos enlaces también te serán útiles:
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