Cajeros automáticos accesibles: novedades y consejos

Una operación sencilla y cotidiana como sacar dinero en un cajero automático puede convertirse en algo complicado para las personas con discapacidad física o sensorial. A las barreras arquitectónicas como la falta de espacio o una altura no adaptada a personas en silla de ruedas, pueden añadirse otras como la falta de iluminación o las pantallas con letra pequeña.

Por eso, desde hace algunos años, las entidades bancarias han centrado sus esfuerzos en hacer sus cajeros automáticos accesibles a todos los usuarios.

APSIS4all, una red pionera de cajeros automáticos accesibles

En el año 2014 CaixaBank instaló 1.300 cajeros automáticos accesibles en toda España gracias al proyecto APSIS4all, acrónimo de la traducción al español de “Accessible Personalised Services in Public Digital Terminals for all”.

Esta tecnología, cuyo objetivo era eliminar barreras de accesibilidad en terminales de uso público, permitía que los cajeros automáticos o las máquinas expendedoras de tickets incluyeran opciones de interacción adaptadas a la diversidad y personalizadas según sus necesidades y preferencias.

El funcionamiento de estos cajeros es sencillo: el cliente accede al panel de control mediante una tarjeta contactless, una tecnología que permite al usuario identificarse acercándola a un lector sin tener que introducirla en una ranura.

Después, al personalizar la interfaz, el titular de la tarjeta puede elegir opciones como avatares que se expresan en lengua de signos o utilizar un lector de pantalla que enuncia las opciones operativas y que sirve como guía para realizar las distintas gestiones.

Una app para encontrar cajeros automáticos accesibles

Por otra parte, en el año 2017, BBVA e ILUNION presentaron una aplicación de smartphone para mejorar la accesibilidad en cajeros automáticos con opciones especialmente dirigidas a personas con discapacidad visual. Su funcionamiento es el siguiente:

• A través de una aplicación en su teléfono móvil, el usuario selecciona la operación que quiere hacer (por ejemplo, sacar dinero).
• La app geolocaliza los cajeros más cercanos y ofrece la ruta más accesible hasta ellos tanto a pie como en transporte público, así como todas las operaciones disponibles.
• Cuando el usuario se acerca al cajero, éste emite un beepcon, una baliza inteligente para facilitar la identificación de objetos cercanos y que sirve como punto de ubicación.
• Una vez en el cajero automático, el usuario introduce la tarjeta o la acerca al lector contactless. En ese momento, éste se conecta a su móvil y realiza la operación que el cliente ha solicitado, previamente, desde su smartphone.

Principales problemas de accesibilidad en los cajeros automáticos

Proyectos como los dos anteriores han contribuido a hacer los cajeros automáticos más accesibles, pero, ¿siguen encontrando problemas las personas con discapacidad para sacar dinero, consultar sus movimientos bancarios o comprar entradas en estas terminales? ¿Cuáles son y cómo pueden solucionarse?

Los principales problemas de accesibilidad de los cajeros automáticos son:

La altura

Las personas que van en silla de ruedas o de estatura baja encuentran dificultades para acceder a los botones, insertar su tarjeta o libreta bancaria, e incluso para ver la pantalla.

La pantalla

Mala iluminación, problemas de visión por reflejo de la luz solar, caracteres muy pequeños... Los problemas para ver la pantalla siguen limitando la accesibilidad en los cajeros automáticos.

Escasa o nula adaptación a la diversidad

Algunas instrucciones de los cajeros automáticos aparecen explicadas de forma compleja y difícilmente comprensible para personas con discapacidad cognitiva o problemas de aprendizaje.

Cómo hacer los cajeros automáticos accesibles: 7 ejemplos prácticos

• La altura de los cajeros automáticos no debe ser superior a 85 centímetros para que puedan ser utilizados por personas en silla de ruedas.
• Si el cajero únicamente dispone de aproximación frontal, su altura libre estará comprendida entre 70-120 centímetros, y la altura libre será de, como mínimo, 85 centímetros. 
• Para ajustarse a las necesidades de personas con problemas de visión, los botones de los cajeros automáticos tendrán una numeración grande, clara y grabada en braille o en relieve. Así, las teclas deben sobresalir como mínimo 2 mm. de la superficie, tener un tamaño mínimo de 10 x 10 mm. y disponerse de forma normalizada, es decir, con el número 5 señalado con un punto de relieve.
• El teclado y los botones de los cajeros automáticos accesibles no deben situarse a más de 140 centímetros de altura. 
• Las pantallas de los cajeros automáticos accesibles deben estar iluminadas a 500 lux y ubicadas con una ligera inclinación de entre 15 y 30 grados, además de ser visibles a una distancia mínima de 10 centímetros y no disponer de obstáculos de visibilidad.
• Las entradas de libretas y tarjetas y las salidas de billetes y tickets de los cajeros automáticos deben localizarse de manera visual y táctil, estar destacadas en color y tener relieve en los bordes.
• Para facilitar la interacción con los usuarios, los mensajes de aviso de los cajeros automáticos accesibles deben ser claros y concisos, y permanecer activos hasta que el titular de la tarjeta confirme o no su conformidad con ellos.

Altura de colocación, altura de los pulsadores, ángulo de la pantalla y del teclado o colocación de las ranuras para tarjetas y salida de billete son algunos de los criterios de diseño y usabilidad a tener en cuenta para que los cajeros automáticos sean accesibles. Un esfuerzo mínimo que hace la vida mucho más fácil a cientos de personas.

Q700-UP M SEDEO ERGO en posición de bipedestación / Q700 M SEDEO ERGO con elevación de asiento

También puedes ayudarte de una silla de ruedas con elevación del asiento o con función de bipedestación, que además de hacerte el mundo más accesible, te proporcionan muchos beneficios a nivel físico y psicológico. ¡No olvides echarles un vistazo!